Durante esta semana los funcionarios de Gendarmería Los Ríos se han mantenido movilizados adhiriendo a la acción que tiene carácter de nacional.
Gremios de la institución penitenciaria paralizaron sus funciones para exigir mejoras en los ascensos, argumentando que las condiciones laborales llevan años detenidas.
El presidente nacional de la Asociación de Gendarmes de Chile, Pablo Jaque, sostuvo que “nos vamos a mantener movilizados a la espera de la respuesta del Gobierno”.
El líder gremial, cuestionó el rol del subsecretario en las conversaciones y llamó al ministro de Justicia, Jaime Gajardo, a adopta un rol activo en las tratativas.
“No puede desentenderse de esta negociación y dejar toda la responsabilidad a un subsecretario recién asumido. Llamamos al ministro a destrabar esta crisis”, manifestó en medios nacionales.
Del mismo modo en Valdivia, Mauricio Valderrama Díaz, suboficial mayor de Gendarmería de Chile, presidente provincial de la Asociación de Funcionarios Penitenciarios de Chile y vocero del Frente de Trabajadores Penitenciarios de Valdivia, aseguró a Grupo DiarioSur que se mantendrán en sus posiciones.
“Esto obedece a la negativa del Gobierno de escuchar nuestras históricas demandas. Tenemos crisis de reestructuración de ascensos y además la escasez de personal, la disminución de medidas de seguridad, la falta de todo tipo de cosas, de vestuario y de equipo, de insumos para realizar nuestra labor diaria”, señala.
El dirigente reiteró que las críticas pasan porque según ellos no tienen carrera funcionaria.
“El gobierno lo sabe perfectamente y, aun así, hacen oídos sordos a nuestras históricas demandas. En abril de este año se formó una mesa técnica de trabajo con el Ministerio de Justicia y el Frente de Trabajadores y no tenemos respuestas concretas a nuestras demandas”.
Valderrama reiteró que el país conoce de los hechos de violencia ocurridos a nivel nacional, lo que ha incidido en el aumento de la población penal.
“En los últimos tres años la población penal a nivel nacional ha aumentado en 20 mil internos en prisión preventiva. Ante eso existe una crisis con el crimen organizado. A nivel país, todas las cárceles ya están teniendo problemas con este tipo de situaciones”.
-Es un verdadero colapso…
“Existe un colapso con respecto a la infraestructura, un colapso al déficit personal. Por ejemplo, el recinto de Valdivia fue diseñado para una población de 1.100 internos y a la fecha tenemos más de 1.600. Eso da a entender que el sistema carcelario nacional se encuentra colapsado. Ya no podemos dar ni siquiera el servicio de habitabilidad a todos los usuarios que tenemos recluidos”.
-¿Eso ha incidido en la violencia al interior de los recintos penales?
“Acá yo me saco el sombrero con el personal, con mis compañeros de trabajo. El profesionalismo que tienen en la labor penitencial que se hace día a día. No podemos flaquear en seguridad. Tanto perimetral como el trato interno a la población penal se mantiene día a día”.
-¿Qué actividades no se están realizando en los penales?
“Todo lo que tenga que ver con comisiones a tribunales, comisiones virtuales que se hacen igual acá en el centro penitenciario se mantienen suspendidas a la espera de las nuevas directrices que nos den desde Santiago. El personal que trabaja para la empresa concesionada y para la inspección fiscal, que es como se trata de una cárcel concesionada, la mantenemos provisoriamente afuera para que se visualice nuestra demanda a nivel nacional y local”.
-¿Cómo sigue este movimiento?
“Desde el nivel central nos comunicaron que este movimiento es indefinido. Ya tuvimos un momento de diálogo, la diplomacia se utilizó, se hizo una mesa técnica de trabajo y aun así no tuvimos frutos positivos”.
Claudio Costa, presidente del sindicato de la empresa concesionada Compascate en Valdivia, confirmó que al interior del penal se mantienen los servicios de las áreas de alimentación y salud.
“La gente que queda afuera es parte del área administrativa. La población penal está siendo asistida”, señala.
Costa comenta que con este movimiento se ha visto afectada la parte administrativa en atenciones hacia la población penal. “En este caso el área de reinserción, lo que corresponde a atenciones psicológicas, de asistente social e informes que se deben realizar y entregar. Reitero, los servicios principales se entregan normalmente”, señala.
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