Acompañado del obispo de Valdivia Santiago Silva, sacerdotes diáconos y sus feligreses, el religioso de la Congregación de los Padres de la Preciosa Sangre, padre Nicanor Azúa, celebró sus bodas de plata sacerdotales con una misa en el templo parroquial ubicado en la población Corvi de Valdivia.
En la ceremonia el religioso, cuya tierra natal es Paine, en la Región Metropolitana, fue acompañado por gran parte de su familia, hermanos y sobrinos, que viajaron exclusivamente para estar en la celebración.
El padre Nicanor tiene una especial cercanía con Valdivia, pues su ordenación fue en esta ciudad un 8 de enero del año 2000 y su primer apostolado como párroco fue en el templo Cristo Rey de la población Teniente Merino.
Con el tiempo el sacerdote fue párroco del templo de Preciosa Sangre y posteriormente fue trasladado a las comunas de Purranque y de Cerro Navia en la Región Metropolitana.
Actualmente realiza su labor pastoral en Preciosa Sangre desde el año 2020, acompañando a la sede principal y también a las capillas Santísima Trinidad y de los sectores de Las Gaviotas, Casablanca y Los Guindos.
Con emoción, el religioso recordó a sacerdotes, diáconos y laicos que le ayudaron a formarse en su vocación de servicio e hizo un especial recuerdo de los padres Ricardo Beischel y Juan Falter, quienes entregaron una vida de servicio a los fieles católicos de Valdivia.
Tras la ceremonia religiosa se hizo un compartir comunitario en el salón de la parroquia Preciosa Sangre con la presencia de todos los feligreses y comunidades que la integran.
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