Una serie de denuncias realizaron padres y apoderados de la escuela Angachilla de Valdivia.
Por lo mismo, esta jornada de viernes efectuaron una manifestación frente al recinto educacional, donde dieron a conocer que al interior de dicho colegio habrían ocurrido malos tratos.
Javier Tello, presidente de la Coordinadora de Centro de Padres, indicó que dentro del colegio Angachilla se han dado casos de violencia.
“El director no ha podido hacer un trabajo de contención con la comunidad y tampoco ha hecho funcionar el consejo escolar. Se nos ha hecho saber acá que las autoridades no han apoyado, no sólo a la escuela Angachilla sino a otros a nivel comunal”, indicó.
El dirigente sostuvo que ha habido reclamos por violencia en el Liceo Técnico, en el Liceo Industrial, el Liceo Armando Robles, entre otros. “Estamos en la escuela Angachilla apoyando a los apoderados que dijeron que hay problemas de infraestructura, calefacción y mala gestión de parte del director”.
Javier Tello hizo una crítica a la alcaldesa Carla Amtmann porque a su juicio “se improvisa con los directores y hasta el momento no se ha hecho los concursos de Alta Dirección Pública para que los directores sean elegidos”.
“Queremos dignidad, que nos escuchen y que se hagan las cosas bien”, declaró Tello.
La tesorera del Centro de Padres de la escuela Angachilla, Verónica Vinique comentó que son 220 alumnos los que asisten a dicho colegio valdiviano. “Vengo en solidaridad de los apoderados porque han ocurrido casos de violencia. En un principio se había acordado hacer un apoyo parental por estas situaciones, pero no se ha implementado”, sostuvo.
“Hay peleas entre niñas y niños. Solicitamos la presencia de Carabineros en una mesa de diálogo. Incluso vi que un niño con un arma de fuego al colegio. Puse la denuncia y esperamos que se aplique el manual de convivencia. No es posible que continúen las agresiones”, declaró.
La dirigente pidió que las autoridades del colegio resguarden la seguridad de los niños.
Alan Carrasco, director de la escuela Angachilla, dijo que empatizan con los apoderados y que hacen todo lo que está a su alcance para mejorar la convivencia escolar.
“Entendemos que hay circunstancias que sobrepasan los límites de la escuela. No perdemos la esperanza de seguir trabajando porque esta es una gran escuela, con funcionarios y profesores que sean entregado por completo a la labor de formar personas”, declaró.
“Hay cosas por hacer y con el diálogo podremos solucionar los problemas”, manifestó Carrasco.
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