- 15 de octubre, 18.45 horas, Hans Fernández pierde el control del camión que conducía, luego que las ruedas traseras de su vehículo resbalaran inexplicablemente. El volcamiento dejó a dos de sus acompañantes con las costillas fracturadas.
- 20 de noviembre, 15.10 horas, Miguel Castro, conduce un camión JAC de 2600 kilos y en cosa de segundos se desestabiliza y termina chocando contra un montículo de tierra a la orilla del camino. Heridos él y su esposa Alexandra Manríquez, que golpeó fuertemente su cabeza contra el parabrisas.
Ambos accidentes ocurrieron casi en el mismo lugar. A 150 metros de la curva de Lumaco, pasado una escuela en ruta que une Futrono con Reumén. Y en ambos casos los choferes de los vehículos afectados coinciden en identificar la causa: los parches de alquitrán que, con la acción de la lluvia y el sol, transforman la vía en una superficie jabonosa.
INFORMAR A LA GENTE
Al momento del accidente Hans Fernández transportaba trabajadores en la empresa García Gross y quiere que se tomen medidas para evitar otros por la misma causa. “La idea es informar a la gente que alquitrán que utiliza la empresa encargada de la mantención es sumamente peligroso. Las autoridades tienen que tomar cartas en el asunto para evitar un desastre mayor”.
Se mostró muy crítico con la técnica de parchado de la vía: “El tratamiento está mal hecho, porque está liso y no tiene la porosidad que necesitan los neumáticos”.
DEMANDA
Miguel Andrés Castro, 43 años, el chofer del último accidente, concurrió el pasado lunes 23 de noviembre junto a su abogado hasta el Juzgado de Garantía de Paillaco para hacer efectiva una demanda contra quienes resulten responsables.
Calcula que gastará más de $1.500.000 para volver a trabajar en su vehículo. Con la demanda espera recuperar ese dinero, además lo que dejará de ganar durante el periodo que estará sin el camión, su única fuente de ingresos.
Viajaba desde Valdivia a Santa Laura cuando su máquina se estrelló contra una pared de tierra.
Tampoco tiene dudas de la causa. “Venía a menos de 80 cuando en la recta el vehículo se gobernó sólo y en un segundo quedamos en dirección contraria. Ese tramo está completo de parches blandos y lisos, una verdadera trampa”, asegura.
CAMIONES
Diario Paillaco concurrió al lugar para obtener videos y fotografías que respalden el reportaje. Mientras estábamos en el sitio, se detuvieron dos camioneros para contar que todo el tramo entre Futrono y Nontuelá tiene el tipo de parche en cuestión.
Jaime Opazo indica que el problema es el tipo de arreglo que hacen en el camino, mientras que Jorge Castillo profundiza que el sistema de parches es el malo. “Al chofer que usted le pregunte acá le dirá que cuando llueve hay accidentes. Evidentemente con la lluvia se resbalan los vehículos”.
Opazo agrega que el riesgo se extiende en toda la ruta, hasta llegar al cruce de Reumén.
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