Cuál es la diferencia entre una computadora con un procesador i3 y un i5

El procesador de una computadora es como el motor de una máquina. Según su potencia y su capacidad, podremos ir más rápido o no. Asimismo, un buen procesador permite realizar varias tareas al mismo tiempo y optimizar los recursos que utilizamos, del resto de los componentes.

Por todas estas razones, es totalmente indispensable contar con un buen procesador en nuestras computadoras, ya sean para trabajo o para diversión. De esta manera, servirá para cumplir con todas nuestras necesidades y ayudará a que seamos más eficientes o tener una mejor experiencia de usuario. 

Si ustedes están buscando su próxima computadora y no saben por qué opción decidirse, en esta nota brindaremos todas las claves que se necesitan para elegir el mejor modelo. Al conocer el funcionamiento de los procesadores y sus distintos tipos, podrán saber si están buscando en el lugar correcto o no. 

Procesadores Intel, los más confiables del mercado

Intel es una empresa estadounidense que desarrolla la mayor cantidad de circuitos integrados del mundo. Estos circuitos no son necesariamente procesadores, ya que pueden cumplir solamente una función determinada. 

Por su parte, los procesadores son capaces de realizar procesos lógicos y, como lo indica su nombre, procesar la información que reciben. Entre sus funciones lógicas se encuentran solamente las básicas como sumar, restar, multiplicar y dividir. Además, es el encargado de ejecutar el sistema operativo, las aplicaciones de usuario y de asignar los accesos a la memoria. 

En la compañía Intel se pueden encontrar tres principales tipos de procesadores que dan un excelente rendimiento: i3, i5 e i7. Recientemente, se anunció también el lanzamiento del procesador i9, pero se encuentra en un apartado más avanzado y sirve para especialistas que realmente realizan tareas que sobre exigen a las computadoras. 

Procesadores Intel i3

En la gama de procesadores, las notebook i3 son el inicio de la gama. Sin embargo, esto no debe prestar a confusión; ya que, hay otros factores que influyen en el desempeño de estos procesadores. 

El primer factor que se debe tener en cuenta es la cantidad de núcleos que posee un procesador. En el caso de los i3, hay dos núcleos con dos hilos cada uno, lo que permite tener dos centros lógicos por procesador. Explicado de esta manera parece un tanto confuso, pero podemos remitirnos al dicho popular, “dos cabezas piensan mejor que una”. 

El segundo factor importante es el caché. Esto es un tipo de memoria precargada que sirve para lanzar el sistema operativo. Mientras mayor sea su capacidad, más rápido podrán procesarse los programas secundarios. 

Procesadores Intel i5

Las notebook i5 son de gama media-alta en el nivel de funcionamiento. Sin embargo, es posible que muchos procesadores i3 tengan mejor capacidad de procesamiento debido a que son de una generación más moderna. 

Respectivamente, un procesador i5 de quinta generación equivale a un i3 de sexta o séptima generación. La única ventaja que un i5 podría presentar es que cuenta con cuatro núcleos contra los dos de un i3. Pero sus conectores son mucho más grandes (por lo tanto, menos rápidos) y su caché es menor. 

La última generación de procesadores que se ha lanzado es la 11. En esta instancia ya se incorporó inteligencia artificial y se mejoraron las gráficas integradas que posee el chip. 

Por lo tanto, para comparar bien un procesador con el otro, se deben tener en cuenta su generación y sus principales características. Para este fin existen páginas de internet que contraponen un chip con el otro para decir cuáles mejor.

Procesador Intel i7

Finalmente, llegamos a lo que representa el tope de gama en las notebook comerciales. Estos microchips cuentan con ocho núcleos muy potentes e incorporan tecnología de punta para optimizar al máximo sus recursos. 

En resumen, deben conocer sus necesidades para poder decidir si se inclinan por una computadora con microchips de gama media-inicial o si prefieren un i7. Obviamente, otro factor importante es el precio, por lo que deberán considerarlo al momento de poner en la balanza todos los beneficios y las desventajas.